
Interno del manicomio,
despierta de tu letargo.
Las alas negras se abren,
dispuestas al vuelo infinito.
Vampiro lunático te esperan,
el espejo ha vuelto a trisarse.
Es la llamada de los antiguos,
los colmillos claman por vitae.
El no-vivo se levanta despacio,
retomando contradictoria senda.
La carcajada demencial asoma,
refleja la luz de su cruz de plata.
Una visión del mundo en ascuas,
el pirómano perfecto ha retornado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario