Un paseo bajo brisa de tarde fría,
ese tabaco enrarecido resplandecía.
El tiempo se vuelve lento, atrasado,
pareciera ver caminar en otro estado,
desean converger en olas infinitas.
¿Cuánto más debemos esperar Diosa?
Imposible negar toda esa impaciencia.
Maleficio pagano ancestral infiel,
entre la gravedad de tus cabellos,
perdido en sus múltiples espirales,
magnetismo instantáneo a los ojos,
la sombra deslumbrante ante el sol.
¿Qué debemos hacer para tropezar?
Son tantas señales de pura evidencia.
Viejo guerrero meditando te alcanza,
en la oscuridad conversan sus vidas,
innumerables épocas han traspasado.
¿Dónde será el lugar apropiado esta vez?
En paseos bajo brisa de tarde fría.
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